martes, 13 de agosto de 2013

Mi amada o sol ardiente de junio




Ahora que el fin está próximo, de pie frente a un abismo oscuro e insondable, dirijo mi mente a tu recuerdo. Rememoro un tiempo encapsulado en el pasado de un jardín de piedra y hiedra en una costa olvidada.

Los últimos rayos de sol, acariciaban tu oscuro pelo rizado, tu ovalado rostro de dulzura resplandecía con el fulgor ardiente de la juventud. Tus labios suaves de terciopelo, me murmuraban palabras que apaciguaban mi pesar, de un fin que debía llegar inexorable a nosotros. Tus ojos, tus ojos... profundas estrellas en el firmamento. Manos que se perdían y encontraban en mundos opuestos. Tímidas sonrisas en un bosque en penumbra. La noche nació entre gemidos de placer. Y luego en silencio, abrazados fuertemente el uno al otro, sin posibilidad de escape a un desenlace doloroso. ¿Cuanto tiempo transcurrió sobre ese manto de suelo verde y húmedo? ¿Un suspiro?¿Mil años?¿Toda una vida? Y antes del amanecer te fuiste. Escoltada por el rumor de las olas del mar y el ulular de la fría brisa. Allí volviste. A tu hogar profundo e imperecedero. Y allí quedé. Solo sin ti. Tan sólo un collar de algas y perlas dejaste como pago por mi dolor.

El dolor de tu partida al eterno océano.
¿De donde viniste?
¿Porque amaste lo imposible?
Huellas de pequeños pies en la arena se adentraban en las heladas aguas...

Y por mas que oteé el horizonte, por más que surqué tu cielo... jamás te volví a ver.
Tan sólo me queda este pequeño recuerdo que agonizará en mi.

El mar me amará con espuma de sal y me adentraré en tu reino olvidado por los mortales que perdieron sus sueños bajo un manto gris de desesperanza.

Ahora frente a mi destino, empiezo a oír el bello canto de tu voz.

Me adentro en ti para siempre,
ahora se acalla el dolor y,
la soledad.

Vuelvo a ti,
mi amada.


Fuentes:
Cuadro: "Sol ardiente de junio"  de Lord Frederic Leighton, producida en 1895.
Enlace a más info del cuadro: http://es.wikipedia.org/wiki/Sol_ardiente_de_junio



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